He escuchado muchos comentarios en las últimas horas acerca de personas que experimentaron un interminable abanico de emociones tras presenciar el fin de la historia del mago más célebre de la historia en la gran pantalla. Personalmente debo decirles que la conmoción a mí me duró lo que tardé en llegar a mi casa desde el cine, o sea media cuadra, gracias al conveniente lugar al que mi familia se mudó hace dos años. Pero no se confundan. No es que el final de la historia me haya pasado inadvertido, simplemente su versión cinematográfica.
A la tierna edad de once años fue que tuve mi primer contacto con este joven aprendiz de mago y, por suerte, dicho encuentro fue a través de su versión literaria. Un buen día, mejor dicho un buen recreo, en el que me encontraba junto a mis compañeros de sexto grado, una gran amiga que probablemente no lea estas líneas terminó de leer La Piedra Filosofal (o sea, el primer libro para los pecadores que desconocían esa información) y me entregó su copia, acto por el que le estaré eternamente agradecido.
Siete años después de ese trascendental momento, la vida encontraba a este humilde narrador haciendo una larga fila para retirar de su librería amiga su copia de Las Reliquias de la Muerte (último libro de la saga que, a diferencia de su versión para cine, viene en una sola parte, gracias a Dios). Como se imaginarán, devoré sus páginas casi enfermizamente y, al cabo de menos de 24 horas, me enfrentaba con la triste realidad que supuso el fin de la historia y el fin de un bello capítulo de mi existencia que penosamente terminaba. Ese duelo que comenzó al terminar de leer la última palabra del último libro todavía continúa y lo hará durante un largo período, al margen de las películas que se estrenaron y que tal vez se sigan estrenando en un desesperado intento comercial por prolongar indefinidamente las regalías que surjan de esta incomparable historia.
Sin embargo, como este espacio está dedicado a las películas, a esto me atendré de ahora en adelante, habiendo dejado en claro que Harry Potter es probablemente lo más grande que se haya escrito en la historia de la humanidad (y de otras especies también) y la mejor forma de disfrutarlo es a través de sus libros.
La segunda entrega de Las Reliquias de la Muerte me pareció muy buena, al margen de ciertas deficiencias que comparte con otras películas de la saga, especialmente las últimas. Francamente me resulta muy difícil referirme a la trama sin revelar datos inconvenientes para el que todavía no la vio, sobre todo si tenemos en cuenta que esta cinta es, casi en su totalidad, el desenlace de una historia que abarca casi 4000 páginas escritas y vaya a saber cuántos miles de minutos de filmación, por lo tanto cualquier dato que les mencione traerá consigo un imperdonable efecto spoiler.
Lo que sí les diré es que, en un análisis abarcativo de la cuestión, creo que la cuarta película (El Cáliz de Fuego) es la mejor de las 8, seguida por la parte 1 de las Reliquias y por su recientemente estrenada continuación, para así darle forma a mi podio personal. Debo decir también que la sexta entrega (El Misterio del Príncipe) es una falta de respeto por donde se la mire y que el resto sí vuelve a ostentar el nivel de excelencia de las antes mencionadas, tal vez destacando un poco la segunda (La Cámara Secreta), por la que tengo un cariño personal.
No me queda mucho por agregar, aunque a la vez podría escribir decenas de páginas más sobre esta historia, solo les diré que envidio a quienes nunca hayan visto una película o tocado un libro de HP, ya que tienen la invaluable posibilidad de recorrer esta magistral historia desde el principio (siempre empezando por los libros, claro). A quienes sí hayan experimentado la magia desde cerca, no puedo más que recomendarles lo que yo hice y seguiré haciendo porque, a la fecha, he leído todos los libros entre 5 y 7 veces cada uno y ya perdí la cuenta de cuántas veces vi cada película.
Ficha Técnica
Reparto: Daniel Radcliffe - Emma Watson - Rupert Grint.
Director: David Yates.
Duración: 130 minutos.
Año: 2011.
Calificación El Guionista: 9.
Calificación para Harry en general: 11.
Películas por catálogo: vayan al cine.
Tráiler para Cine
Hola!
ResponderEliminarA ver...Por dónde comenzar? Me sucedió algo muy raro con Harry Potter. Durante años mis prejuicios o quizás mi estupidez me llevó a defenestrar al mago sin haberme tomado el trabajo de ver ni una peli -mucho menos esos libros gigantes sin ilustraciones-. (bla,bla,bla) El año pasado me compré mi LCD y un reproductor de Blu-ray. Comencé a comprar primero mis películas favoritas (Disney) y luego algunas que pudieran lucirse en HD. Fue por esa única razón que decidí comprar HP y la piedra filosofal. Llegué a casa. La vi sólo por el entusiasmo de seguir probando el chiche nuevo y... QUEDÉ CON LA BOCA ABIERTA. No pude creer que una historia pudiera atraparme de tal manera. Necesité más y fui al día siguiente a comprarme HP y la cámara secreta. Ya estaba inmerso irremediablemente en ese universo mágico creado por Rowling. En pocos días compré todas las películas (una ventaja más que valiosa no tener que esperar un año por cada nueva entrega) (bla,bla,bla) Este año un amigo me dijo que si las películas me habían gustado DEBÍA leer los libros. Dije que no, un tanto desanimado por la cantidad de páginas. Pero él no sólo insistió sino que me trajo todos los tomos. Hace falta decir que después de leerlos me sentí indignado con los realizadores de la peli? A través de las incontables páginas pude descubrir el alma y los tormentos que llevaban a Harry y compañía a cada acción (algo totalmente olvidado y mutilado en el cine)(bla,bla,bla)
En fin, en el transcurso de un año vi las películas y leí los libros. Me sumergí en esta historia épica en su mensaje y su simbología tan actual. Creo que el cierre fue digno. No voy a spoilear, pero mi final hubiese sido otro. Pero ese es otro tema...
Ayy hablaría horas sobre esto!!!
Un abrazo!
Ese debe haber sido un GRAN año jajajaja Por mi comentario de la película ya sabrás que primero leí los libros y después vi las películas por lo que ya sabía de antemano que las películas iban a decepcionarme (o por lo menos que nunca iban a poder compararse con los libros). Ah, también debo aclarar que aunque no haber tenido que esperar al estreno de cada libro/película es bueno (como te pasó a vos Marxe), esos lapsos de ansiedad hasta que se publicara el nuevo libro o se estrenara la nueva película son algo que extraño, ahora que la magia se terminó jeje
ResponderEliminarAbrazo Marxe y gracias como siempre
PD: tmb ya te acepté en Facebook ;)