viernes, 4 de enero de 2013

Felicidades

Ya pasaron las fiestas y un nuevo año ha comenzado. Sin embargo, es normal que aún nos quede un gustillo de esas celebraciones y de cómo lo hemos pasado; en mayor medida si aún estamos compartiendo tiempo con nuestra familia, ya sea en nuestra vivienda o en el lugar de veraneo escogido para esta temporada. “Las fiestas”, pese a repetirse a cada año, son un fenómeno único e irrepetible; y muchas veces, completamente distinto a las anteriores. Es por eso que, manteniendo nuestra intención de ahondar en el cine nacional, la opción de hoy, cuyo título es más que elocuente, hará foco en la Navidad y en todo lo que produce las últimas fechas de cada año. Con ustedes, Felicidades.


Juan (Luis Machín) es un famoso escritor, abatido y no para nada feliz, que debe viajar con urgencia de Rosario a Capital Federal. Rodolfo (Pablo Cedrón) es un médico que la vida y la muerte pasan frente a él constantemente, haciéndole notar lo solo que se encuentra. Julio (Gastón Pauls) es un odontólogo de valores y ética que debe conseguir el regalo para su hijo antes de la medianoche. Ellos deberán lidiar con sus problemas, mientras el resto de las personas se encuentra disfrutando y festejando de la Nochebuena.

La estirpe minimalista que tanto fascina e idolatran los realizadores locales, se encuentra firme en esta película coral. El concepto es claro: extraer la esencia de la historia, suprimir cualquier tipo de detalle y hacerla lo más pequeño posible, dividiéndola en tres historias, en este caso. La primera y única realización del director Lucho Bender, al comenzar, seduce con sus protagonistas, generando expectativas y dudas. Pero a la mitad del metraje, se torna densa y logra salir adelante, mayormente por sus personajes secundarios.

Pablo Cedrón (El Aura), es un actor que me genera simpatía ya que tiene una gran facilidad para encarnar personas introspectivas, sensibles y retraídas. Además le tengo cariño por haber participado en la mejor telenovela de los últimos 20 años de la televisión argentina: Campeones de la Vida. Gastón Pauls (Días de Vinilo) es un muchacho que, particularmente, si lo sacan de la comedia, no me produce absolutamente nada. Mientras que Luis Machín (Un oso rojo, Sin retorno) es un gran actor que no creo que haya sido suficientemente explotado aquí. Igualmente considero que los tres protagonistas están entre bien y muy bien; pero, de elegir, claramente escojo el trabajo de Cedrón (quien también es uno de los guionistas de la obra).

No obstante, hay una gran labor de los secundarios, comenzando con el comediante medio pelo, interpretado por el multifacético y talentosísimo Carlos Belloso (actor que deslumbró a la audiencia televisa como su papel de “el Vasquito”, también en Campeones). Marcelo Mazzarello, como un paralítico bastante desenvuelto, que nos causará irritación como compasión (en especial, cuando cita a El Principito). Pero quien se roba el espectáculo, es Alfredo "el Gordo" Casero, encarnando a Fredi, un vecino chusma y charlatán, como ventajista. También es parte del elenco la actriz española, Silke, e incluso se dan el gusto de hacer su aparición el reconocido cantante popular, Chacho Castaña, como el detective Cueto, y mi ex compañera de facultad, la modelo, Mariana Arias, en una participación muda.

Nominada al Cóndor de Plata por mejor película del 2000, fue derrotada por Nueve Reinas, aunque obtuvo el galardón por mejor ópera prima e, inexplicablemente, fue la candidata argentina para los premios Oscar de esa temporada. No me malinterpreten: no estoy diciendo que Felicidades sea una mala película; sólo afirmo que, bajo ningún punto de vista, puede ser considerada superior que Nueve Reinas.

Quizás por sus historias personales o por ser más “nuestra”, pero para mí no está mal mirar a Norteamérica y adoptar lo positivo, especialmente en lo narrativo, donde nuestro cine falla tanto (tornando una aguda o profunda obra, en un bodrio digno de no ser visto por más de veinte minutos, por ejemplo). Por eso es que Juan José Campanella (El Secreto de sus Ojos, El Hijo de la Novia) ha dejado tan rezagados a sus demás colegas: él ha sabido complementar esa escuela con nuestra identidad y costumbre y es por eso que, en la actualidad, es nuestro director más destacado.

Lo que me parece brillante de Felicidades es la mirada que se le dio a las fiestas de cada fin de año. Hollywood y su industria cultural, nos ha querido hacer creer que, en estas épocas, todo es amor, risas y romances. Eso está bien para la inocencia y alegría de un niño; pero los adultos sabemos que no es así.

Las fiestas, más aún la Navidad, son mínimamente nostálgicas o, incluso, melancólicas. Depende de cada uno y de sus familias convertirlas en un verdadero festejo; pero de la melancolía a la tristeza pura, hay un solo paso. Esto queda retratado de manera perfecta en la vida y la soledad de los personajes de la cinta; quienes atraviesan situaciones totalmente desesperantes y angustiosas, en un contexto de que ya, de por sí, es desesperante y angustioso para ellos.

Estos sentimientos también se trasladan al espectador, sin entender cómo es que no explotan ante esos escenarios: y este es el otro punto distintivo de este largometraje. Ni Julio, ni Rodolfo, ni Juan hacen una estruendosa catarsis. No. Pero por algún lado fugan esa desazón y desencanto… aunque no se les puedo decir cómo, sino les estaría saboteando el giro más importante y descolocante en la línea dramática de cada personaje.

Desde El Guionista, les deseamos un gran 2013, lleno de éxitos y metas cumplidas. Gracias por visitarnos y por compartir otro año de mucho cine y recomendaciones con nosotros. Muchas Felicidades.

Ficha Técnica

Reparto: Gastón Pauls – Pedro Cedrón – Luis Machín.
Director: Lucho Bender.
Año: 2000.
Duración: 100 minutos.
Calificación El Guionista: 7.
Películas por catálogo: incluida.

Tráiler para Cine


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