De la misma manera que
Carlitos Bianchi ha decidido despertarse de su larga siesta y volver a dirigir
en el fútbol argentino y que Rafa Nadal planea su vuelta al mundo de las
raquetas para la primera semana de febrero, consideré necesario que una tercera
figura de similar calibre también protagonice su retorno, en este caso, a nuestro
querido El Guionista que, de hoy en adelante, normaliza su régimen de
publicación peliculístico de cara a la temporada de entrega de premios que ya
ha comenzado y que encontrará su punto culminante a fines del mes que mañana
comienza cuando se entreguen los Oscars. Por consiguiente, y dado el contexto
planteado, hoy decidí traerles algo distinto y que, por su propia definición,
funciona perfectamente como previa de cualquier gran evento venidero. Todo eso
y más, a continuación.
Como muchos de ustedes sabrán,
y otros no, entre las tantas categorías que la Academia de Hollywood ha
adoptado para su entrega de los premios Oscar, está incluida la que selecciona
a cinco cortos de animación para, el día de la ceremonia, premiar al mejor de
la temporada. Y es allí donde Paperman
entra en escena.
Me encontraba yo en una de las
cómodas salas de cine que el Abasto posee en la ciudad de Buenos Aires, cuando
los clásicos trailers o avances previos a la película llegaron a su fin. Pero
en vez de que se produjera el clásico apagado de las luces para la óptima
apreciación del largometraje en cuestión (en este caso: Ralph, el Demoledor que ya ha pasado por este espacio), la pantalla
se llenó con un recurso que Disney y Pixar nos vienen regalando desde hace ya
unos años: un pequeño corto de cinco o seis minutos que sirve como entremés del
film que uno está por ver. Como amante del cine y, debo confesar, de Disney
también, no puedo menos que agradecerle a los estudios del recordado Walt por
esta yapa que, casi sin proponérselo, ya tiene su nominación a los premios más importantes
del séptimo arte.
Y como no quiero arruinarles
demasiado la sorpresa que la historia de Paperman
propone (creo que su llegada al público como preludio de otra película busca
generar ese efecto sorpresivo e inesperado), solo voy a agregar que, en apenas
seis o siete minutos, este cuento de hadas moderno logra tratar temas tan
complejos como la valentía, la perseverancia, la suerte, el destino y la
búsqueda del amor con una profundidad y una belleza que muchas producciones que
superan las dos horas de duración (y a veces más) no llegan a conseguir.
Ah, otra cosita. Los muchachos
de Disney la tienen tan clara que ya subieron el corto entero a YouTube, así
que podrán verlo completito en la parte inferior de esta crítica, después de la
ficha técnica, claro ;)
Ficha Técnica
Director: John Kahrs.
Guionistas: Clio Chiang - Kendelle Hoyer
Guionistas: Clio Chiang - Kendelle Hoyer
Año: 2012.
Duración: 7 minutos.
Calificación El Guionista: 10
No hay comentarios:
Publicar un comentario