Live Forever

Durante esta semana, además de la ocupación que conlleva estudiar para los finales y el momento de ansiedad para rendirlos, pensaba en el poco tiempo que iba a tener para ver una película y poder comentarla aquí, en El Guionista. En un momento de brillantez personal, sentado frente mi material de estudio, recordé haber visto la noche anterior un documental sobre un momento clave en la historia de la música: El britpop de los ‘90s.

Live Forever: The Rise and Fall of Brit Pop es una producción cinematográfica que se centra en la última década del S. XX, en Gran Bretaña y tiene como principales exponentes a las bandas de rock que más se destacaron durante esa época (Oasis, Blur y Pulp), en su origen, su apogeo y su desenlace. Sin embargo, la música no es la única protagonista: también están presentes la política, las drogas, la lucha de clases y la eterna rivalidad Reino Unido vs. Estados Unidos.

Me encantan los ‘60s con los Beatles o los ‘70s con The Who y Led Zeppelin; pero yo soy hijo de los ‘90s, y el grunge junto al britpop fueron quienes me criaron. Inevitablemente, si hablamos de esa década y de esos dos movimientos artítisticos-generacionales, tengo que decir que los máximos referentes fueron Nirvana y Oasis. El grunge se adueñó de la escena, desplazando al superficial y poco representativo glam rock hasta que, en 1994, Kurt Cobain murió, dejando un enorme vacío: como nuestros salvadores, los hermanitos macana de Manchester, formaron Oasis, dispuestos a reivindicar sus raíces sin la banalidad del glam, pero  tampoco con el pesimismo del grunge. 

No soy muy aficionado a los documentales, pero sí disfruto muchísimo hacer zapping y encontrarme con aquellos que se especializan en bandas de rock, de las cuales soy fanático. En este tipo de formatos lo que más busco y más valoro son los documentos o archivos que sirven para contextualizar la historia que se quiere contar, pero, por sobre todas las cosas, lo que más me importa son los testimonios: tanto quién lo dice como qué es lo que dice. Éste es el punto más fuerte de Live Forever: sus protagonistas nos relatan sus experiencias de manera directa, sin vueltas ni filtros.

No es nada que no se conozca, pero tiene mucho más fortaleza cuando son ellos mismos quienes nos lo cuentan. Albarn admitiendo lo avergonzado que se sintió al haber sido utilizado como títere por los medios y las productoras; Noel declarando abiertamente cuál considera mejor de sus dos álbumes más elogiados; o Liam confesando sus travesuras delictivas de adolescente y su escaso interés por la música.

En cuanto a lo negativo, debo decir que es algo sesgado e incompleto. Sesgado en cuanto a la poca importancia que le dan al grunge, diciendo que “la única banda decente era Nirvana”, habiendo otras excelentes como Pearl Jam, Soundgarden, Stone Temple Pilots o Alice In Chains. Incompleto con respecto a la escasísima participación de Radiohead, un grupo formidable con 27 años de trayectoria y manteniendo siempre la misma formación. Tampoco estoy de acuerdo con la teoría del péndulo que uno de los periodistas sostiene: el faro del rock siempre estuvo y estará puesto en Inglaterra, pese a ciertas modas que se dan en Estados Unidos.

Sin embargo, esta cruda y frontal pieza artística fija su lupa, de manera picante y crítica, en la batalla mediática entre Oasis y Blur (algo que no sucedía desde la época Beatles – Rolling Stones), los prejuicios y enfrentamientos entre la clase obrera del norte y la clase media del sur, como también entre lo británico y lo estadounidense, y el ascenso del partido laborista, de la mano de Tony Blair. Por este motivo, a los que ésta temática los atrapa y fascina como a mí, los invito a verla.

Ficha Técnica

Reparto: Noel Gallagher – Liam Gallagher – Damon Albarn – Jarvis Cocker.

Director: John Dower.

Año: 2003.

Duración: 80 minutos.

Calificación El Guionista: 8.

Películas por catálogo: lo suelen pasar por I.Sat y está en YouTube.

Tráiler para Cine: Aquí.

Documental completo