Perfect Sense

Desde El Guionista sabemos muy bien que está muy lindo esto de los Oscar, los actores y la fanfarria de Hollywood que se ponen vestidos carísimos y hacen espamento varias horas antes, se quedan analizando hasta qué tipo de dentífrico usa Billy Crystal, si está bien que haya ganado The Artist, si lo de Sacha Baron Cohen fue una actitud desafiante y osada o si fue una pelotudez sin precedentes y varias cosas por el estilo. Pero ya está, ya fue, podemos sacar conclusiones que vayan un poco más allá y no quedarnos con detalles como los mencionados.

Precisamente, esa es mi intención con la crítica de hoy. Sería sacrílego de mi parte decir que El Artista no se merece el reconocimiento como la Mejor Película, el premio está muy bien dado, pero viendo la elección de esa terna en particular y del resto también, me dio la sensación de que yo tengo en cuenta otras cosas a la hora de considerar a una película como magnífica. Así que, miembros de la Academia, tomen nota (risas).

Desde lo visual, con el uso de distintas técnicas para el rodaje, toda la parte artística y demás elementos de ese estilo, tanto la mencionada cinta dirigida por Michel Hazanavicius como Hugo son dos obras maestras que merecen todo el reconocimiento. Sin embargo, yo privilegio la historia, lo que la película cuenta, por sobre todos esos elementos; por eso creo que la ganadora debió haber sido otra (para enterarse de cuál es esa otra, vean este video que hizo El Guionista como previa de los Premios de la Academia, si es que todavía no lo hicieron).

De esta manera, películas del estilo de Perfect Sense son las que logran conmoverme. El film cuenta la historia de amor entre una científica, Susan (Eva Green), y un cocinero, Michael (Ewan McGregor), pero no en las circunstancias normales que este tipo de relaciones suelen presentarse. Ambientada en Inglaterra, la trama romántica encuentra su contexto en un presente casi apocalíptico en el que un raro virus se está propagando rápidamente por todo el mundo, sin que los expertos puedan hacer nada al respecto. Algo así como lo que pasó a mediados del 2009 con la gripe A, pero con la diferencia que la enfermedad producida por el virus de esta película tiene como principal síntoma la pérdida de los cinco sentidos. En este contexto, que a medida que pasan los minutos se va convirtiendo en la trama principal de la película, estos dos solitarios jóvenes buscarán realizar su utópico sueño de permanecer juntos.

Desde el vamos, la historia ya es distinta, planteando un mundo completamente nuevo que abre posibilidades impensadas, a esto se le suman las buenas actuaciones de Eva Green, a quien muchos recordarán por su papel como la Chica Bond en Casino Royale, y Ewan McGregor (Beginners y Cassandra's Dream) que, si estás dudando entre ver una con él y una con otro como protagonista, la elección es sencilla porque nunca te deja a gamba; y finalmente, el mensaje final de la película es maravilloso y logra ese efecto al que me he referido en críticas anteriores por el que la escena que cierra la historia hace que toda la película cobre un nuevo sentido, en este caso, uno muy inspirador y valioso.

Ficha Técnica

Reparto: Ewan McGregor - Eva Green - Connie Nielsen.

Director: David Mackenzie.

Duración: 92 minutos.

Año: 2011.

Calificación El Guionista: 8.

Películas por catálogo: incluida.

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