The Aviator

Coincido plenamente con mi amigo y colega, Facu Franco, que las películas biográficas deben cumplir con dos requisitos: que el personaje en cuestión sea interesante y que el relato de sus experiencias sea muy bueno. Estas condiciones (sumadas a la necesidad de interesantes roles secundarios) son vitales para lograr una excelente obra de este género y que no se parezca a un documental.

The Aviator (El aviador) toma un fragmento importante de la vida de Howard Hughes, desde los fines de su adolescencia hasta un par de décadas después. La historia comienza a fines de los años 20’s, donde Hughes (Leonardo DiCaprio) está rodando su primera película: The Hell’s Angels. El joven perdió a sus padres hace pocos años atrás y heredó una gran fortuna de la empresa petrolera paterna. Pero sus pasiones son otras: el cine y, especialmente, la aviación. Pese a las incesantes críticas de la prensa y a gastar millones en su film; tres años después, consigue estrenar la tan ansiada obra épica. Las calificaciones son completamente favorables y Hughes se asienta en Hollywood como una de sus figuras más relucientes.

Siendo todo un playboy, siempre elegante, de personalidad atractiva y multimillonario, conquistará a muchas bellas damas, especialmente actrices del mundo cinematográfico. Pero esas no son sus únicas características. Además de ser alguien muy pasional, trabajador y emprendedor; nuestro héroe sufre de trastorno obsesivo-compulsivo (algo que quedará manifestado en todos los momentos de la cinta; especialmente en su manía con la limpieza). Su condición irá creciendo desfavorablemente, a niveles asombrosos, y esto generará grandes conflictos con todas su parejas, como Katharine Hepburn (Cate Blanchett) o Ava Gardner (Kate Beckinsale), haciéndole difícil la posibilidad de establecerse con una mujer.

Siempre será acompañado por sus fieles amigos Noah Dietrich (John C. Reilly) y Glen “Odie” Odekirk (Matt Ross) quienes deberán soportar todas las demandas del multimillonario; haciéndolo con mucha paciencia y no sólo por el dinero, sino también por el aprecio hacia su amistad. Como toda figura pública, despertará la admiración del público, pero también el odio de sus competidores; tal es el caso de Juan Trippe (Alec Baldwin), el magnate de la aviación comercial, dueño de Pan American Airlines. Una vida llena de distintos matices y experiencias gratificantes; pero también con su salud y sus bienes siempre al límite.

Con la película de hoy hará su debut, en cuanto a mis recomendaciones, uno de mis actores favoritos y de los mejores de las últimas dos décadas: Leonardo DiCaprio. Interpreta a Howard Hughes de una manera brillante, en uno de sus tres mejores papeles que realizó hasta ahora. La cinta es esencialmente su presencia y un 100% su talento. Sus expresiones, sus movimientos, sus miradas nos retratan al personaje que seguramente no conozcamos previamente pero que con esta notable interpretación ya podemos imaginar. En él se puede ver reflejado a lo que apunta El Aviador: la obsesión y dedicación que despierta una actividad, un sueño; en definitiva, una pasión. Además de denunciar el contexto social de la Segunda Guerra Mundial, quedan descubiertos las irregularidades del estado norteamericano; las mismas que nuestro héroe fomenta y luego debe combatir.

El resto del elenco es increíble; ya les nombré a varios y todavía me faltan algunos que realizan pequeñas participaciones. La actuación de Cate Blanchett es sobresaliente: interpreta de manera magistral a Katharine Hepburn (y la verdad es que es una personificación idéntica). La actriz atraviesa su peor momento profesional y es considerada “veneno para las taquillas”. Además sufre de celos ante la exposición de nuestro protagonista y su reconocimiento público (algo que ella hace mucho no recibe y añora). Kate Beckinsale, como Ava Gardner, deslumbra con su belleza en un papel sólido pero más pequeño sin grandes giros dramáticos. También se destacan el trabajo de los veteranos, y grandes actores, Ian Holm (en su rol de profesor y compinche de Hughes) y Alan Alda (como el presidente del comité especial).

Decir que Scorsese es un gran director, es una obviedad. No se puede negar su calidad: primero, hay que tener en cuenta que el film dura casi tres horas y, la verdad, se hace muy llevadero. Su intensidad y dinamismo hacen a esta obra muy amena. Además se puede notar su talento en como expone la enfermedad obsesiva de Hughes (como en la escena del avión y la botella de leche o la de las toallas en el baño). Pero también debo decir que manipula bastante la imagen de “El aviador”, dejándolo como un héroe, cuando en realidad no era una persona muy pulcra. Todo esto se complota para crear un gran personaje que, sin dudas, es muy rico dramáticamente; pero que está muy lejos de ser la persona más ética del planeta. Además debo confesar que el final me hace ruido: no me atrevería a decir que es malo; sólo que hubiera preferido otro.

Una película interesantísima, que obtuvo 11 nominaciones al Oscar y se consagró en 5 de ellas (donde se destacan el de Cate Blanchett por mejor actriz de reparto). Podemos abrir el Wikipedia o cualquier sitio en la web y averiguar la historia completa de Howard Hughes; pero su valor es ínfimo comparado al de esta cálida y pasional cinta.

La verdad es que disfruto mucho viendo esta película que, en mi opinión, debió haberse alzado con el Oscar a mejor película; premio que finalmente se lo llevó Million Dollar Baby (y acá sé que me voy a ganar unos cuantos enemigos). Volviendo a El Aviador, quiero destacar dos escenas magníficas, a las cuales les recomiendo que presten mucha atención: la del almuerzo en la finca de los Hepburn y la de las audiencias (con cierta esencia que me hace recordar a las de El Padrino: parte II).

Ficha Técnica

Reparto: Leonardo DiCaprio – Cate Blanchett – Kate Beckinsale.
Director: Martin Scorsese.
Año: 2004.
Duración: 170 minutos.
Calificación El Guionista: 8
Películas por catálogo: incluida.

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