Y no es casualidad. Por empezar, este tipo de films no cuenta con grandes locaciones o, mejor dicho, no cuenta con muchas variantes a la hora de elegir lugares para que transcurra la acción al margen de ese pueblito en particular. Tampoco hay muchos personajes. Un protagonista, uno o dos laderos o amigos del protagonista, algún personaje femenino potente (si no es que el protagonista pertenece a este género) y otro que se anteponga al encargado de llevar adelante la trama. No mucho más. Ah y, por lo general, un muy buen director que sepa hacer lo más importante en estos casos.
Aprovechar los recursos, por
escasos que sean. Esa es la clave para este tipo de películas. Si no hay
doscientos escenarios para darle diversidad a la cosa, démosle identidad propia
a este pueblito que nos tocó. Si no hay setecientos extras y personajes
secundarios para sostener la trama en algún momento en especial, profundicemos
en la complejidad de los tres o cuatro con los que contamos. Si no hay
presupuesto para grandes escenas de acción o con grandes efectos especiales,
generemos el mismo nivel de dramatismo a través de los diálogos o de la
evolución del personaje. Ese es el arduo proceso al que estas películas se
someten.
¿El resultado? You can count on me, The Magic of Belle Isle, In the Land of Women o nuestra
recomendada del día: Adventureland.
Películas largamente superiores a muchas otras que las triplican en
presupuesto.
En este caso, nos encontramos
con la historia de James Brennan, un joven oriundo de Pittsburgh que, habiendo
finalizado sus estudios secundarios, tiene perfectamente claro lo que el futuro
-y este verano que acaba de comenzar en particular- le depara. Aceptado en una
de las más prestigiosas universidades de Nueva York, James está a punto de
partir a Europa para dar comienzo al viaje que, junto a su mejor amigo, viene
planeando desde hace rato. Sus padres ya le prometieron el dinero para cumplir
este sueño y cuenta con la tranquilidad de que, al volver, lo espera su cuarto
en el campus de la NYU.
Pero lo inevitable sucede. Si
no, la cosa no tiene gracia. Después de la ceremonia de graduación en su
colegio, James se encuentra compartiendo una cena de festejo con sus padres
cuando estos, de la forma más diplomática posible, le informan sobre la
precaria situación económica que está atravesando la familia. Ahora, no solo no
podrán darle el dinero para viajar a Europa (que le habían prometido si lograba
las calificaciones necesarias para entrar a la universidad), sino que tampoco
podrán afrontar los gastos que este establecimiento educativo supone. Es por
esta razón que James no tiene ni tiempo de lamentarse por no poder irse de
viaje ya que, de la noche a la mañana, su principal objetivo pasa a ser
encontrar cualquier trabajo para desarrollar durante el verano y así poder
empezar a pagar los gastos de la universidad que no son precisamente una ganga.
¿Cuál será la respuesta a sus
problemas? Adventureland. Además de
darle título a la película, este vocablo hace referencia al pequeño parque de
diversiones que, todos los veranos, abre sus puertas para que niños y adultos
de todo el pueblo de Pittsburgh puedan divertirse a pesar del hecho de no haberse
podido ir al Caribe o a algún otro lugar por el estilo. Queda clarísimo que,
contra su voluntad, James pasa a ser uno de los tantos adolescentes que van a
pedir trabajo cada verano en esta especie de feria de pueblo para poder
comprarse vaya a saber qué con un dinero que sus padres no pueden darles. Así
que, en cuestión de horas, este simpático personaje se encuentra con que cambió
sacarse fotos en la Torre Eiffel o deambular por los pasillos del coliseo
romano por limpiar el vómito de los nenes que no pudieron resistir el viaje en
la montaña rusa o sacarle brillo a las paredes de La Casa de los Espejos.
Lo último que me queda por
agregar es que esta película es una nueva muestra de la gran capacidad actoral
de uno de mis actores jóvenes preferidos como es Jesse Eisenberg (The Social Network, Zombieland, To Rome with Love),
llevando adelante el rol protagónico del film. Tampoco se quedan atrás Kristen Stewart (The Yellow Handkerchief, Into the Wild, In the Land of Women), capaz de intercalar sus participaciones en
la ultrapochoclera saga Crepúsculo con enormes actuaciones en grandes películas
como las mencionadas entre paréntesis y Ryan Reynolds (Definitely Maybe, Linterna
Verde, Enterrado) que, por lo
menos a mí, me sorprendió bastante y para bien en esta película.
Un gran drama/comedia de
pueblo que, gracias a una excelente historia, grandes actuaciones, una magnífica
dirección y una inolvidable banda sonora de fondo (particularmente con este tema de Lou Reed), vuelve a dejar claro que aún las peores decepciones que
nos da la vida pueden ser el inicio de algo mucho mejor de lo que inicialmente
perdimos.
Ficha Técnica
Reparto: Jesse Eisenberg - Kristen Stewart - Ryan Reynolds.
Director: Greg Mottola.
Año: 2009.
Duración: 107 minutos.
Calificación El Guionista: 8.
Películas por catálogo: incluida.
Tráiler para Cine
Tráiler para Cine
No hay comentarios:
Publicar un comentario